Si hay un plato con el que siempre se acierta es este...pollo asado...a quién no le gusta el pollo?
Rico, completo, fácil de hacer y que te deja libre hasta el momento de servirlo. Con pocos ingredientes y como siempre digo... con mucho cariño.
Ingredientes (para 2 personas):
Preparación:
Precaliento el horno a 180º arriba y abajo (con ventilador). Pelo las patatas, las lavo, las troceo en dados y salpimento. Las dispongo en una bandeja de horno junto con los ajos sin pelar y dejando hueco para el pollo. Salpimento el pollo por ambos lados y lo coloco con la piel hacia arriba en la bandeja. En un cuenco pequeño vierto el vino, aceite, agua, sal, romero y el zumo de medio limón, lo emulsiono bien ayudándome con un tenedor y echo un poco por encima del pollo y las patatas reservando el resto para regarlo de nuevo cuando esté a la mitad del horneado. Utilizo la mitad del limón esprimido para cortarlo en rodajas y añadirlo a la bandeja con el resto de ingredientes. Lo mantengo en el horno unos 45 minutos. La piel se queda crujiente y el resultado... un clásico pollo asado con un aroma a campo con ese puntito a romero que me traslada a la montaña sin salir de casa.
Reconozco que el mejor pollo asado que he probado es el que hace mi padre, está increíblemente bueno, pero también hay que decir que él tiene un horno de leña y ese saborcito tan peculiar a ahumado, sólo se consigue con una buena madera. Le pone mucho interés, desde que enciende la primera llama hasta que lo lleva a nuestros platos asi que el resultado no puede ser otro. Cuando lo vuelva a hacer pondré unas fotitos. Hoy nos quedamos con el mío.
Rico, completo, fácil de hacer y que te deja libre hasta el momento de servirlo. Con pocos ingredientes y como siempre digo... con mucho cariño.
Ingredientes (para 2 personas):
- 2 cuartos de pollo (2 contramuslos)
- 2 patatas medianas
- 4 ajos
- 2 cucharadas soperas de aceite de oliva
- sal
- pimienta
- medio limón
- medio vaso de vino blanco
- medio vaso de agua
- 4 grs. de romero seco
Preparación:
Precaliento el horno a 180º arriba y abajo (con ventilador). Pelo las patatas, las lavo, las troceo en dados y salpimento. Las dispongo en una bandeja de horno junto con los ajos sin pelar y dejando hueco para el pollo. Salpimento el pollo por ambos lados y lo coloco con la piel hacia arriba en la bandeja. En un cuenco pequeño vierto el vino, aceite, agua, sal, romero y el zumo de medio limón, lo emulsiono bien ayudándome con un tenedor y echo un poco por encima del pollo y las patatas reservando el resto para regarlo de nuevo cuando esté a la mitad del horneado. Utilizo la mitad del limón esprimido para cortarlo en rodajas y añadirlo a la bandeja con el resto de ingredientes. Lo mantengo en el horno unos 45 minutos. La piel se queda crujiente y el resultado... un clásico pollo asado con un aroma a campo con ese puntito a romero que me traslada a la montaña sin salir de casa.
Reconozco que el mejor pollo asado que he probado es el que hace mi padre, está increíblemente bueno, pero también hay que decir que él tiene un horno de leña y ese saborcito tan peculiar a ahumado, sólo se consigue con una buena madera. Le pone mucho interés, desde que enciende la primera llama hasta que lo lleva a nuestros platos asi que el resultado no puede ser otro. Cuando lo vuelva a hacer pondré unas fotitos. Hoy nos quedamos con el mío.
Leticia: bienvenida a este mundoque te va a apasionar. Gracias de antemano por todo lo que nos vas a mostrar, y el blog tiene una pinta estupenda.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo de estos manchegos!
Muchas gracias. La verdad es que le estoy poniendo mucha ilusión. Mira, me has sacado una sonrisa! por cierto, aunque residente en Madrid yo tambien soy manchega!!
ResponderEliminarUn abrazo.