Hoy traigo otro de esos pinchitos o aperitivo o... o... bueno como queramos llamarlo y emplearlo porque también nos puede servir como postre! Fácil, con ingredientes de andar por casa y muuuuy bueno, como debe ser!
Ingredientes:
- peras
- queso feta
- hojaldre fresco
- azúcar blanquilla
Preparación:
Precaliento el horno a 180º.
Extiendo el hojaldre en la encimera y lo corto en rectángulos iguales y no muy grandes (estos pinchos se comen en dos, tres bocados, no más). Los coloco en una bandeja de horno forrada con papel vegetal y los llevo a hornear unos 20 minutos. Cuando veo que han crecido y cogen un tono dorado los saco del horno. Quito la mitad de los hojaldre y los dejo fuera del horno, reservo.
En los otros espolvoreo azúcar por encima y los llevo al horno en la opción de gratinado a 200º para que el azúcar se haga caramelo. Muy importante, lo vigilo para que no se queme. Una vez caramelizado, lo retiro del horno y dejo templar.
En los otros espolvoreo azúcar por encima y los llevo al horno en la opción de gratinado a 200º para que el azúcar se haga caramelo. Muy importante, lo vigilo para que no se queme. Una vez caramelizado, lo retiro del horno y dejo templar.
Mientras, corto el queso en láminas del mismo tamaño que el hojaldre. Lo mismo con la pera: la lavo y corto en láminas finas (mantengo la piel). Monto las milhojas, una base de hojaldre sin caramelizar, dos, tres láminas de pera, una de queso feta y termino con otra de hojaldre pero caramelizada.
Preparadas! No me digáis, es rápido, diferente y una mezcla de sabores en la boca que funciona!